
20 Sep Carta de una huésped de Suesa
Compartimos la carta que una huésped (hemos omitido aquellos datos que pudieran identificarla) nos dejó tras su estancia en la hospedería del monasterio. Gracias a ti A. por enriquecernos con tu presencia orante y tranquila. ¡Claro que oramos…!
Suesa, 25/8/2016
Queridas hermanas:
Me preguntaba ayer cómo era posible que en solo 9 días una pueda conectar tanto y tan intensamente con vosotras. Creo que no os imagináis lo mucho que os debo personalmente (¡vine rota!). Lo mejor es que compruebo que no solo me pasa a mí.
Esas celebraciones que abrís a quienes llegan al monasterio son inlovidables, porque consiguen adentrar en el Misterio mañana, tarde y noche con los pies en la tierra.
Conseguís que ese mundo concreto que os preocupa hondamente, se haga visible de forma contemplativa y tierna, haciéndoos cargo de él y despertando nuestra conciencia crítica y nuestra responsabilidad histórica mientras nos dirigimos a Dios.
Me encanta la frescura que aporta vuestra insistencia en el femenino plural. Todos vuestros gestos y palabras se entienden. «No dais puntada sin hilo»…
Se os percibe sabias, sencillas, hondas, felices. Contagiáis vuestras ganas de vivir al servicio del Reino.
Y entre vosotras se percibe una complicidad preciosa. Este debe de ser el secreto que os hace llegar cada día a atender a tantas cosas sin perder vuestra alegría.
Como podéis comprobar me encantaría que Dios os multiplicara vocacionalmente.
Pedid por nuestra «nueva» comunidad (…) que pasado mañana comenzará su andadura. Os necesitamos.
Un gran abrazo.
A.