Fiesta de San Félix de Valois

«San Félix da Valois ha sido venerado en la tradición de nuestra Orden como cofundador. Fue uno de los ermitaños que San Juan de MAta encontró en el desierto de Cerfroid, y que pronto se unió a su proyecto siendo para él un auténtico consuelo y apoyo en las dificultades. Sabemos que juntos fueron a Roma a solicitar el Papa Inocencio III la aprobación de la regla trinitaria y, consecuentemente, la aprobación de la Orden. Más tarde fue ministro en la casa de Marsella donde murió posiblemente hacia el año 1212, un año antes que San Juan de Mata.

Para las monjas trinitarias San Féliz de Valois es una fuente de inspiración en nuestra vida de silencio y oración, la misma vida que llevaba él en el desierto de Cerfroid. En este lugar y en este ambiente de retiro, de oración, es donde se escribe la regla trinitaria y donde sin duda se vislumbra el proyecto trinitario». (extraído de www.federaciondemonjastrinitarias.com).

Efectivamente, como Félix, es en la oración donde podemos ir encontrando guía para nuestra vida. No podemos olvidar que resulta complicado pretender llevar una vida cristiana sin tener relación con Cristo a través del silencio y de la oración.

Los enamorados necesitan hablar, hacer cosas juntos, compartir con otras personas, y también necesitan momentos de silencio íntimo, momentos para construir la relación desde el silencio, desde la conversación amorosa del corazón silencioso.

El silencio, la oración, el discernimiento,… todo son tablas hermosas de un mismo puente.

«Felix» día de san Félix